Tras el explosivo divorcio del jueves retransmitido en directo entre Donald Trump y Elon Musk, este viernes ambas partes trataron de bajar el tono del enfrentamiento. Musk financió la campaña del republicano y le ayudó a ganar las elecciones, mientras que Trump empezó a tomar decisiones que beneficiaban al empresario, en una simbiosis en que ambos ignoraban los conflictos de intereses. Pero igual que ambos se han ayudado, también pueden hacerse daño —mucho daño— mutuamente.
Furia y desconcierto por la prohibición de entrada de Trump a ciudadanos de 12 países: «No podemos permitir que les conviertan en chivos expiatorios»
La medida del republicano establece restricciones para una lista de naciones entre las que están Irán, Yemen, Haití, Cuba o...