Por Santos Cano Luzardo
Fuentes de inteligencia adscritas a la DEA y organismos de seguridad colombianos han confirmado, de manera extraoficial, que el exjefe de inteligencia financiera venezolana y señalado narcotraficante Pedro Luis Martín Olivares habría sido designado por el gobernador del estado Táchira, Freddy Bernal, como su asesor de seguridad.
Según las fuentes consultadas, Martín Olivares no solo coordinaría el esquema de seguridad personal del mandatario regional, sino que también estaría encargado de proveer los escoltas a través de una empresa de seguridad privada vinculada directamente a él.
Narcotráfico bajo protección política
Investigaciones preliminares indican que Martín Olivares estaría utilizando su nueva posición para facilitar operaciones de narcotráfico a gran escala, específicamente exportaciones de cocaína hacia Europa y Estados Unidos. La operación contaría con el respaldo logístico y la protección del propio Bernal, según las fuentes.
El esquema incluiría la participación de carteles colombianos y grupos paramilitares que abastecen de droga, permitiendo a Martín Olivares organizar un corredor libre de obstrucciones para el transporte de cientos de kilogramos de cocaína mensualmente.
Vínculos con el crimen transnacional
De acuerdo con los informantes, Martín Olivares también estaría actuando en alianza con antiguos miembros del grupo del fallecido narcoganadero José Guillermo «Ñeñe» Hernández, una figura central en escándalos de narcotráfico y corrupción que han salpicado a sectores políticos tanto en Colombia como en Venezuela.
Antecedentes y recompensas internacionales
Cabe recordar que Pedro Luis Martín Olivares ha sido señalado por el Departamento de Estado de los Estados Unidos como un importante narcotraficante extranjero. En 2020, se ofreció una recompensa de hasta 10 millones de dólares por información que condujera a su captura, según documentos oficiales del gobierno estadounidense.