LOS TESTAFERROS DE GRANKO ARTEAGA: José Desiderio Ferraz Aguiar y su hermana Sorieli Ferraz Aguiar, son un par de joyitas «enchufados» de la robolución que son testaferros del recién ascendido de la Contrainteligencia chavista madurista, Alexander Granko Arteaga.
Arteaga es un corrupto que goza de una fortuna disfrazada de crecimiento empresarial. Lo hizo a través de una veintena de familiares y amigos que hoy integran una red de 30 compañías.
Los hermanos Ferraz Aguiar, son pieza clave en el entorno de este militar rojo rojito, uno atiende sus negocios en Miami, en el caso de José Desiderio, con expedientes abiertos por estafa de vehículos, mientras que su hermana, Sorieli Ferraz, está al frente de una farmacia en Caracas y se dedica a la estafa con el mismo «modus operandi» de su hermano, pero ambos se creen intocables.
Alexander Enrique Granko Arteaga, alias Barba, nacido en marzo de 1981, empezó como escolta del expresidente Hugo Chávez, un cargo que percibe un salario en bolívares. Aun con esa desventaja inicial, hoy apenas cuarentón, mantiene un alto nivel de vida inalcanzable para la mayoría de los venezolanos.
Es catalogado en su entorno como un «choro» pesado de la DIGCIM, tiene en su haber cuantiosos negocios que van desde discotecas, bodegones, fincas, fábrica de acero, y pare de contar, mucho de estos negocios manejados por su esposa.
Los hermanos Ferraz Aguiar, son parte de sus testaferros, por ende son delincuentes que operan entre Miami y Caracas, ahi les dejo eso, para que conozcan a quienes están detrás de estos sendos «guisos» de los militares corruptos del chavismo. Dan asco. Y tienen sus días contados, aseguran en redes sociales.